Tourmalet (2.115 mts)
El desafío de hoy (sábado 3 de julio de 2004) supone intentar coronar el puerto de montaña posiblemente más mítico de la historia del Tour de Francia: El Tourmalet. El gran ogro de los pirineos. Tras un buen puñado de kilómetros de calentamiento por los alrededores de Luz St. Sauveur iniciamos el ascenso sabiendo que hemos de dosificar el esfuerzo si no queremos desfallecer en las durísimas y larguísimas rampas de este coloso pirenaico.
Fotos del ascenso en panoramio.
El primer km. no reviste demasiada dureza, de esta forma llegamos al pueblo de Esterre. Pasado el pueblo la pendiente comienza a endurecerse manteniéndose sobre el 7-8%. En el km 4 pasaremos dos curvas de herradura de menor desnivel que nos sirven para relajar algo los músculos. En el km 5 volvemos a encontrar otras dos curvas de herradura mientras vamos remontando por la carretera camino de las cumbres pirenaicas. En el km 7 atravesamos la localidad de Bareges, punto de referencia importante en la ascensión. Bareges es el último pueblo que encontraremos. La carretera atraviesa el pueblo siempre picando para arriba y a su salida nos enfrentaremos a 2 kms de gran dureza (8-9%). ¡Empieza el sufrimiento! Pasando el km 9 y con las piernas resentidas por la dureza de las rampas que acabamos de remontar (alguna del 12%), encontraremos el único descanso antes de enfrentarnos al coloso todavía sin desenmascarar. Son unos 600m prácticamente en llano que coinciden con la entrada a la estación de esquí de Superbaregen que la encontraremos si seguimos todo recto.
Nosotros tomaremos la carretera a mano derecha donde un carter nos indica el Col du Tourmalet. Una vez tomado este ramal, tendremos durante los próximos 5 kms porcentajes mantenidos entorno al 8-8.5%. En este tramo pasaremos un bonito jardín botánico junto a un restaurante al tiempo que la carretera gira a la izquierda y nos dará paso a las vistas más espectaculares de la ascensión. No es raro que a estas alturas os encontréis sobrevolando sobre vuestras cabezas a aficionados al parapente que observarán desde su lugar privilegiado el sufrimiento por el que atravesais. De esta forma alcanzaremos los 3 últimos kilómetros, que se hacen los más duros.
En primer lugar por la paliza que ya llevamos encima (16kms) y en segundo lugar porque los porcentajes de los 2 últimos son más agresivos si cabe. El último km tiene de media un desnivel del 9%. Si se llega muy tocado a este punto, las últimas rampas se hacen interminables. Ahora se trata de alcanzar la cima con la energía que quede.
Llegar arriba es el premio que todo ciclista añora. ¡Lo hemos conseguido!
En la cima, además de encontrar el cartel del Tourmalet y una estatua que representa a un ciclista, hay un estupendo restaurante donde se puede comer a mesa y mantel. Todo un lujo!! En el restaurante, fotos de momentos míticos de ciclismo, bicicletas antiguas, dedicatorias (una de Indurain), etc.. nos hacen sentirnos en el restaurante donde siempre hubiéramos soñado disfrutar de una comida.
¡Ah! En la cumbre también encontramos llamas. Si, si, habéis oído bien, llamas. Y no estamos en Perú, ni en la Cordillera Andina, estamos en la France!
Esta es la placa que encontrareis en la cima del Tourmalet, todo un alegato a su historia y a su merecida leyenda. Para el que no consiga traducir le reproducimos lo que dice en el último párrafo:"El 21 de Julio de 1910, Octave LAPIZE fue el primer corredor del Tour de Francia en coronar el Col del Tourmalet. Se llevó la etapa Luchon-Bayonne de 326 kms en 14 horas y 10 minutos". No creo necesario añadir nada mas.